SANTA MARTA_ Al cumplirse un año del accidente vial en Gaira, en donde la camioneta Toyota Hilux que manejaba el empresario Enrique Vives Caballero mató a 6 personas y dejó herida a una, las voces de lamento no cesan. Familiares y amigos afirman que «el dolor sigue intacto».
Hoy el responsable de la tragedia está privado de su libertad, con detención domiciliaria. Fue condenado a 7 años y 8 meses de cárcel pena que purga en su residencia.
Vives indemnizó a sus víctimas, con las que firmó una conciliación que permitió que el delito de homicidio cambiara de culposo a doloso.
El accidente cobró la vida de Camila Romero Troncoso y su hermano Elenoir De Jesús Romero, de 17 años. También fallecieron Rafaela Petit, de nacionalidad venezolana, Juan Diego Alzate Ordóñez, de 17 años, María Camila Martínez Mendoza, de 24 años y Laura Valentina De Lima Ordoñez, de 18 años.
El herido fue Brayan José Añez Faneite, venezolano, de 13 años y sobrino de Rafaela Petit.
JUSTICIA DIVINA
Alex de Lima, padre de Laura Valentina de Lima, dijo que «la vida nos cambió un 100 por ciento» y añadió que «mi familia no está completa, nos hace falta ese ser querido que siempre estuvo ahí para compartir».
«Tenemos el mismo dolor del primer día», manifestó sollozante.
Agregó que «no vamos a insistir más con procesos legales, le vamos a dejar eso a la justicia divina».
«Aquí en Colombia la justicia terrenal no sirve para nada, si tú no eres de familia pudiente la justicia para ti no existe. Si no tienes plata no pasa nada. La gente se dio cuenta ya que lo que prevalece es el poder», comentó.
No justifica que le dieran casa por cárcel por arrebatar seis vidas. «Digamos que él no lo quiso hacer, pero cometió un error garrafal, conducir ebrio», precisó.
Además, el empresario indemnizó a las víctimas del accidente, quienes aceptaron firmar una conciliación en la que permitieron que la tipicidad del delito variara de homicidio doloso a culposo o involuntario.