BERLÍN_ El aislamiento que ha significado para Rusia la guerra contra Ucrania, ha causado que muchos rusos hayan abandonado el país hacia lugares donde no tengan restricciones de visa.
Uno de estos países es Argentina, que no pide una visa para ciudadanos rusos. Georgy Polin, jefe del departamento consular de la Embajada de Rusia en Argentina, estimó que en 2022 se trasladaron a Argentina entre 2.000 y 2.500 rusos, muchos de los cuales, dijo, eran mujeres rusas que planeaban dar a luz en el país. «En 2023 año, ese número puede crecer a 10.000», dijo Polin.
La ventaja de la segunda ciudadanía
Y es que muchas mujeres embarazadas acuden al país latinoamericano para poder brindarles a sus hijos los privilegios de una segunda ciudadanía. Mientras con el pasaporte ruso sólo pueden viajar a 80 países sin restricciones, el pasaporte argentino permite realizar viajes de corta duración a 171 países sin visado, incluidos la UE, el Reino Unido y Japón. Además, los padres extranjeros de un bebé nacido en Argentina pueden obtener la nacionalidad argentina fácilmente en menos de dos años.
En un extenso reportaje en la revista británica The Guardian contó la historia de Polina Cherepovitskaya, una de la rusas que decidieron trasladarse a Argentina para el nacimiento de su hijo. Cherepovitskaya y su esposo abandonaron Rusia tan pronto inició la invasión, en vista de la cantidad de puertas que se estaban cerrando para los ciudadanos rusos.
«Descubrí que estaba embarazada poco después de que comenzara la guerra en Ucrania”, dice Cherepovitskaya. «Cuando vimos que las fronteras comenzaron a cerrarse rápidamente a nuestro alrededor, supimos que teníamos que encontrar un lugar al que pudiéramos viajar fácilmente. Un pasaporte argentino le abrirá muchas puertas a mi hijo”, dice con tranquilidad la mujer a The Guardian, quien ya dio a luz.
Agencias especializadas en turismo de maternidad facilitan los trámites
Incluso existen agencias que ayudan a las mujeres a gestionar los trámites. Una de ellas es la agencia Baby.RuArgentina, cuyo fundador Kirill Makokeev afirmó en la entrevista con The Guardian que su empresa ayudó a más de 100 mujeres rusas y a sus parejas en el último año.
Makokeev comenzó su carrera en Argentina en 2014 como guía de viajes, pero rápidamente se dio cuenta del potencial que tenía el país como destino de turismo de nacimiento y decidió enfocarse en este campo en 2018. Las mujeres rusas que se trasladan a Argentina para dar a luz pagan ahora entre 1.000 y 8.000 libras a los intermediarios que ofrecen, entre otras cosas, con traducciones y la burocracia.
Según cuenta Makokeev, tiene reservas hasta mayo de 2023 y una larga lista de espera. Añade que más de una «docena de rusas embarazadas” aterrizan en Buenos Aires cada día. La capital ha sido el destino favorito entra las turistas de maternidad por el fácil acceso y la buena atención médica. Cherepovitskaya y su marido planean quedarse a vivir en esta ciudad y solicitar la ciudadanía.
*Informe de DW