MOMPOX_ La Universidad del Magdalena se hizo presente en el Festival de Jazz de Mompox con un show lleno de tradición y ritmos caribeños fusionados con el jazz norteamericano. El ensamble de latin jazz Carpe Diem fue el encargado de deleitar al público con una propuesta innovadora donde la mezcla de dos culturas musicales tocaron la fibra de quienes disfrutaron al ritmo de cumbias, porros y fandangos en la Plaza Santa Bárbara.
Estudiantes del Programa de Tecnología en Artes Musicales del Centro para la Regionalización de la Educación y la Oportunidades – CREO, bajo la dirección doblemente ganador del Grammy Latino maestro Milton Salcedo Cuao, docente del programa, hicieron vibrar el corazón de Mompox con aires tropicales de gaitas, acordeones y el sonar de tambores.
“Es un honor estar en este espacio de reconocimiento nacional e internacional, presentándonos por primera vez con una propuesta original. Gracias al apoyo de UNIMAGDALENA y al Rector Pablo Vera Salazar, hoy nuestros estudiantes cumplen el sueño de estar en esta gran vitrina musical. Para esto se prepararon con todo el compromiso y dedicación y hoy vemos el más hermoso resultado a través de los aplausos del público”, anotó Gustavo Andrés García Acevedo, Coordinador del Programa de Tecnología en Artes Musicales.
Los latidos de UNIMAGDALENA en clave de jazz
El estudiante de séptimo semestre del Programa de Tecnología en Artes Musicales Julio Cesar Lozano Robles, resaltó que: “Nuestra Alma Mater nos ha apoyado y brindado los mejores docentes, el mejor estudio y los mejores equipos para poder prepararnos. Gracias doctor Pablo Vera Salazar, por su gestión hoy este es un sueño cumplido. Estar aquí es un privilegio que no tienen los estudiantes de otras instituciones y todo su esfuerzo nos abre puertas tan importantes como las del Festijazz de Mompox”.
“Contamos con el mejor programa musical y hoy desde nuestro corazón sentimos más que nunca el orgullo de pertenecer a UNIMAGDALENA. Tener la oportunidad de mostrarnos en una vitrina internacional como esta, nos llena a nosotros y nuestras familias de un inmenso orgullo y nos da la certeza que este sueño se convierte cada día en una realidad”, señaló Carlos Leandro López Abello, estudiante de séptimo Semestre.
Por su parte, Jesús David Riascos Barros, estudiante de quinto semestre, anotó: “A todos nos corre por las venas el sabor caribe, el sonido de las guitarras, los tambores, las gaitas, los acordeones. Al estar aquí tocando con el alma, con pasión, sólo podemos agradecer a Dios y toda la gestión de nuestro Rector Pablo Vera Salazar y al Director de CREO, Wilson Velásquez Bastidas, porque este es un peldaño más para cumplir por completo nuestro sueño de ser profesionales en la música y llevar con orgullo siempre el nombre de UNIMAGDALENA”.
Carpe Diem tocó el corazón de Mompox
Con una sentida ovación, el público del Festival de Jazz de Mompox se rindió ante una presentación que combinó talento, pasión y fusión de raíces. Carpe Diem conquistó corazones, afloró sentimientos y provocó lluvia de aplausos que fueron recibidos con total gratitud por los estudiantes del ensamble.
“El trabajo que hacen es maravilloso. Interpretar esas melodías que nos identifican como colombianos, combinadas con el jazz, es todo un deleite. Estoy segura que estos jóvenes dejarán huellas imborrables a lo largo de sus trayectorias. Un aplauso para la Universidad del Magdalena por impulsar tanto talento” manifestó Elsy Bermúdez Barros, asistente del Festijazz, procedente de Cartagena.
El Historiador de jazz, Javier Araoz Giraldo, procedente de Ibagué, resaltó: “Carpe Diem es un ensamble musical espectacular, divina presentación. A los jóvenes, que sigan esa disciplina y esa cultura musical tan enriquecedora. Su presentación nos ha cautivado junto a la magia de Mompox”.
Momposina, un homenaje del alma para al cielo
En medio del entusiasmo y mensajes llenos de esperanza, los músicos de Carpe Diem rindieron un sentido homenaje a su compañero Ricardo Goenaga, quién tocaba el bajo y hace un mes perdió la vida en un accidente.
Frente a los familiares de recordado estudiante, sus compañeros cerraron la presentación con su mirada al cielo y voces entrecortadas, con la interpretación de Momposina, una de las piezas favoritas de Ricardo, que seguirá sonando en los instrumentos de la agrupación que siempre lo recordará con mucho afecto.
En nombre del ensamble, Katherine Díaz Orozco estudiante de cuarto semestre, concluyó: “Esto ha sido una experiencia real que nos llena de entusiasmo y esperanza en el campo que hemos escogido para profesionalizarnos. En medio del dolor que tenemos en el corazón por la partida de Ricardo, le decimos que siempre estará en nuestros corazones, que en cada nota lo tuvimos presente y que estos aplausos también son para el y su familia”.
La Universidad del Magdalena siempre valora el esfuerzo y trabajo de sus estudiantes, por ello continuará en la tarea de abrir todos los espacios posibles para que logren sus metas y cumplan sus sueños al lado de sus familias.
