TIERRALTA_ En los bosques del Parque Natural Paramillo, en la zona rural de Tierralta (Córdoba), un niño de 13 años ayudó a un grupo de exploradores de la Sociedad de Ornitología de Córdoba (SOC) a hacer uno de los descubrimientos más importantes en el campo del estudio de aves en Colombia: hallar el nido de un águila crestada, una especie rara de la que poco se ha estudiado.
Durante la Semana Santa nació una cría del ave, un acontecimiento histórico al ser el primer registro oficial en el país, catalogado como el paraíso de las aves al contar con aproximadamente dos mil especies en todo el territorio.
El águila crestada o Harpía Menor está distribuida desde el sur de México hasta el norte de Argentina, mide aproximadamente 80 centímetros, se alimenta de monos, osos perezosos, pavas, reptiles, y su presencia en la región es sinónimo de la buena preservación de los ecosistemas.
“Es un descubrimiento muy importante. En el continente americano hay otros registros uno en Panamá y otros tres en Brasil. Este tipo de águilas necesitan de bosques bien conservados para subsistir y en la región del Alto Sinú, a pesar de las adversidades como la tala de árboles, la pérdida de bosques o la caza ilegal, tiene una gran riqueza en cuanto a biodiversidad”, explicó el presidente de la SOC, Hugo Herrera.
Desde hace años la entidad viene trabajando con las comunidades de la región para crear conciencia ambiental, proteger y conservar este tipo de especies. Ha sido un trabajo complejo, debido a que muchos eran cazadores y tenían en la mira al águila por el temor de que fuese a comerse a los animales de sus fincas.
El equipo de la Sociedad de Ornitología de Córdoba realizará una expedición en los próximos días para instalar cámaras trampas y hacer mejores registros para conocer más detalles de esta especie.
Para el biólogo e investigador, Oswaldo Cortes, registrar y documentar la etapa reproductiva de esta rapaz y el crecimiento de la cría será fundamental para entenderlas y trabajar por su cuidado y preservación.
Precisó que “en Colombia no hay una cifra exacta de individuos, pero si logran descubrir todo lo que la requiere, es el momento ideal para que todos los expertos que trabajamos en conservación empecemos a impulsar su cuidado”.