El Morro de la bahía, uno de los emblemas de Santa Marta, poseedor de los arrecifes coralinos más hermosos de la zona, está siendo afectado en su lecho marino debido a los años de latigazos por parte de la cadena de una boya de señalización, la cual ha dejado una porción significativa del arrecife en deterioro, borrando cualquier rastro de vida alrededor de la misma.
Localizada en el costado suroriental del promontorio rocoso, la boya – que funciona como alerta a los navegantes – con su larga cadena y anclajes, con el tiempo empezó a erosionar el arrecife, aspecto que fue detectado por buzos.
En marzo del 2023, la Fundación para la Investigación Atlántida Marina, Fiatmar, filmó el momento en el que el garreo de la boya ocasionó que la cadena volteara y destrozara todo a su paso, incluidos corales con decenas de años de antigüedad.
«Pusimos en alerta a la Dimar, a través de la Capitanía de Puerto y unos días después vimos que la boya había sido reubicada, dejando los anclajes en una zona más profunda y con menos potencial de daño», anotó la bióloga marina y buzo Lina Rico, directora de citada Fundación.
¡OH SORPRESA!
El pasado 18 de septiembre, en el marco de la Semana Aware, que promueve a nivel mundial la conservación y cuidado del medio marino, buzos de Fiatmar, cuantificaron el área afectada por la boya y determinaron su cobertura arrecifal.
El grupo de trabajo observó que el área afectada alcanza más de 700 metros cuadrado, con cobertura coralina menor al 2 por ciento.
Pero la sorpresa fue mayúscula, al notar los buzos que nuevamente la boya fue reubicada cerca de la zona impactada, sobre el arrecife sano, destrozando por el momento 4 metros cuadrados de arrecife.
La bióloga Rico sostiene que aunque la boya fue ubicada allí hace unos pocos días, todo apunta a que «el daño se irá extendiendo en el tiempo con el garreo y movimiento natural del oleaje en ese sector».
«Se detectó, además, que la cadena vieja que se encontraba en el fondo embebida en el arrecife, fue levantada recientemente, arrastrándose sobre las colonias vivas, erosionado y lastimando todo a su paso», reportó la bióloga marina y buzo profesional.
Indicó que el monitoreo y los hallazgos se realizaron en compañia de Corpamag y de profesionales de Conservación Internacional, siendo reportado prontamente a la Dimar.
«Es urgente cambiar la ubicación de los anclajes y procurar la restauración del area destruida», comentó Lina Rico.
Añadió, con tristeza, que «es sumamente preocupante que esto pase y que se repita».
«No son denuncias, son acciones ante hechos que lastiman nuestros ecosistemas», precisó.
El morro de Santa Marta cuenta con un arrecife coralino ubicado en sus faldas desde el metro de profundidad, alcanzando en algunos lugares, más de 40 metros, con cobertura entre corales blandos, esponjas de gran tamaño y corales duros.
LAS OTRAS TAREAS
Lina Rico comentó que todas las actividades desarrolladas en la Semana Aware, han sido en coordinación y pleno conocimiento de las autoridades competentes, tales como Corpamag, Dimar, Parque Tayrona, Cabildo Indígena de Taganga, Guardacostas.
Contó además con el apoyo de Ongs como Conservación Internacional, Proyecto Marea y Cim Caribe.
En el marco de la semana en mención se extrajeron una lona de camión y 40 sacos llenos de escombros en el Parque Tayrona.
Entre sacos y lona se sacaron 350 kilogramos de basuras, más o menos unas 30 colonias de coral se encuentran muertas en el área impactada y se trasplantaron 28 cabezas de coral alrededor de la lona.