SANTA MARTA_ El corredor vial entre Ciénaga y Barranquilla, ubicado en la jurisdicción del Magdalena, se encuentra en plena transformación gracias a tres ambiciosos proyectos que buscan frenar la erosión costera y mejorar la movilidad en la región. Las obras incluyen el desarrollo de una doble calzada, la construcción de viaductos y la habilitación de una variante.
El proyecto más avanzado es la construcción de la Variante de Ciénaga, liderado por el Instituto Nacional de Vías (Invías). Según los gremios del Atlántico, se espera que esta obra se entregue en el primer trimestre del próximo año, lo que ha generado expectativas en la región, dada su importancia estratégica.
“La vía Barranquilla-Ciénaga tiene un tráfico promedio diario de 13.000 vehículos, conectando al norte de la región Caribe y al oriente y centro del país. Este corredor es crucial, ya que facilita la llegada del 75 % de los alimentos que se comercializan en la Central de Abastos de Barranquilla”, destacó Efraín Cepeda Tarud, presidente del Comité Intergremial Atlántico.
Cepeda también hizo un llamado al Ministerio de Medio Ambiente y a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) para que agilicen el trámite de la licencia ambiental necesaria para iniciar la construcción de los viaductos en el kilómetro 19 de la vía Ciénaga-Barranquilla. Estos viaductos son fundamentales para garantizar la continuidad del proyecto y evitar posibles «estrangulamientos» en la movilidad.
Además, se subrayó la importancia de avanzar en el proyecto de la doble calzada de 54 kilómetros en este corredor vial. Este proyecto, que incluye la operación y mantenimiento de 85 kilómetros de la vía Ciénaga-Barranquilla, será ejecutado por el consorcio Ruta Magdalena Sierra Mar, bajo un esquema de inversión privada. El contrato ya ha sido firmado con la Gobernación del Magdalena y actualmente se encuentra en fase de preconstrucción.
El presidente del Congreso de la República, Efraín Cepeda Sarabia, señaló que, aunque las obras de la Variante de Ciénaga están próximas a finalizar, es preocupante que los otros dos proyectos aún no avancen con la misma celeridad. “Es incongruente que no se agilice el paso para concretar los otros dos proyectos. Si se hacen en desorden y se deja de último el que probablemente sea el más importante, que son los viaductos, vamos a tener unas calzadas estranguladas. No podemos esperar más tiempo para iniciar las obras”, advirtió.
Finalmente, Rodrigo Negrete, director de la Anla, aseguró que el proyecto requiere una última aprobación para su culminación, lo que se espera sea gestionado en los próximos meses para dar paso a la ejecución completa de estas obras vitales para la región Caribe.