SANTA MARTA_ El Juzgado Undécimo Administrativo de Santa Marta generó polémica tras admitir una inusual acción de tutela presentada por el locutor Juan Padilla Arnedo, quien solicita que los concejales del distrito sean sometidos a evaluaciones psicológicas y psiquiátricas.
La demanda surge a raíz de lo que el locutor describió como el “comportamiento circense” de los miembros del cabildo en las sesiones, lo que, según él, pone en duda su capacidad mental para ejercer sus funciones. “La ciudad requiere, exige y merece respeto y consideración por parte de los concejales del Distrito de Santa Marta. Las evidencias presentadas son claras y contundentes, y por ello la valoración clínica psiquiátrica de cada uno de los cabildantes, por parte de Medicina Legal, debe ser ipso facto”, declaró Padilla Arnedo.
En su resolución, el Juzgado ordenó admitir la acción de tutela y vincular al proceso a todos los concejales, además de solicitar informes detallados a la Procuraduría de Santa Marta, la Personería Distrital y la Defensoría Regional del Pueblo. Estas entidades deberán responder en un plazo de dos días hábiles, bajo la gravedad de juramento.
La decisión ha provocado reacciones diversas en la opinión pública. Algunos consideran la medida como un llamado de atención necesario ante las actuaciones de los concejales, mientras que otros la califican de exagerada e improcedente.
Por ahora, los concejales de Santa Marta se encuentran bajo la lupa, a la espera de que avance el trámite judicial que definirá si se lleva a cabo la valoración solicitada.