RIOHACHA_ Continúan las repercusiones por el caso de los carrotanques prometidos por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) para mitigar la escasez de agua en La Guajira, se ha revelado una situación alarmante en el corregimiento de Windpeshi, a tan solo 30 minutos del municipio de Uribia.
Según Caracol Radio, denuncias regionales apuntan a que la comunidad, destinada a ser una de las beneficiadas, está recibiendo agua no potable, agravando aún más la crisis en la región.
A pesar de los esfuerzos anunciados por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, que incluyen la distribución de agua a través de varios puntos de captación como acueductos centrales, industriales y municipales, la realidad en el terreno cuenta una historia diferente.
Los reportes de la comunidad de Windpeshi, hasta la fecha, indica que solo ha llegado un carrotanque a la zona, el cual, además, sufrió un percance al quedar enterrado en el desierto esta semana.
Los residentes del corregimiento han levantado la voz, denunciando que el agua recibida es salada y no apta para consumo humano. Esta situación ha provocado un aumento en las enfermedades relacionadas con la calidad del agua, poniendo en peligro la salud de la población.
La promesa de una solución a través de los carrotanques se ha visto empañada no solo por la entrega de agua no potable sino también por la falta de claridad en la vinculación laboral de los conductores de estos vehículos, quienes han expresado su preocupación por la ausencia de condiciones laborales definidas.
El caso de Windpeshi resalta una vez más las dificultades que se han generado por el tema de los carrotanques, que fueron adquiridos para enfrentar en La Guajira una lucha contra la escasez de agua, un problema estructural que demanda una acción inmediata y coordinada de todas las entidades involucradas.