PIVIJAY_ Ni el Covid-19 en el peor momento, que generó confinamiento en distintos lugares de Colombia, había convertido a Pivijay en un pueblo fantasma.
Desde hace 48 horas, cuando el anuncio del Clan del Golfo de realizar un paro armado en distintos lugares de Colombia llegó a esa población, todos entendieron el mensaje. Todo está cerrado. Todo está desolado.
La amenaza del también conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia no fue tomada en broma.
“Ni el covid-19 encerró tanto a las personas que este paro armado. Por ejemplo este puesto de chance, sin importar lluvias o calor siempre estaba lleno, hoy ustedes puede ver que se encuentra completamente vacío por las amenazas”, afirmó Luis Rodríguez, habitante de Pivijay, en una transmisión por redes sociales para un medio de comunicación local.
Como el puesto de chance, está el mercado público. Un viernes o sábado tiene mayor movimiento de personal; más activo. Hoy está desolado. O al menos así permanecerá 48 horas más.