SANTA MARTA_ Después de una semana de intensas operaciones de búsqueda y rescate en la imponente Sierra Nevada de Santa Marta, finalmente se logró el exitoso rescate de dos parapentistas que habían sufrido un accidente en el Pico Colón. Pero lo que destacó en este rescate no fue solo la eficacia de las operaciones, sino también el gesto conmovedor que siguió al salvamento.
El personal humano que participó en la delicada tarea de rescatar a los parapentistas, entre lágrimas y muestras de agradecimiento por parte de los rescatados y sus familias, entregó una emblemática moneda. Esta no era una moneda ordinaria, sino una cargada de significado: «Un Ángel de Metal me salvó la vida».
El metal no solo se convirtió en un símbolo de gratitud, sino también en un testimonio tangible de la labor heroica llevada a cabo por los hombres y mujeres que participaron en la misión de rescate. Desde el Comando Aéreo de Combate No. 3 y el Comando Aéreo de Transporte Militar – CATAM de la Fuerza Aérea Colombiana, hasta la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo y Desastre, la Cruz Roja, el CRUE Magdalena y la invaluable ayuda de la comunidad indígena Mamancaná, todos contribuyeron a este logro.
La operación de rescate fue un desafío extremo debido a la ubicación geográfica y las graves lesiones sufridas por los parapentistas. Se desplegó un helicóptero UH-60 Black Hawk, apodado «Ángel», desde el Comando Aéreo de Combate No. 5 en Rionegro, Antioquia, con una tripulación altamente entrenada para enfrentar situaciones de alto riesgo.
Los parapentistas, quienes sufrieron múltiples lesiones, fueron trasladados desde una altura aproximada de 12 mil pies junto con los equipos de socorro y personal médico hacia el CACOM 3 en Malambo, Atlántico, para recibir atención médica especializada en un hospital de tercer nivel.
El Comandante del CACOM 3, en un acto lleno de solemnidad y gratitud, entregó la emblemática moneda a los parapentistas, inmortalizando así el recuerdo de su supervivencia en un evento tan desafiante. Este gesto no solo reconoce la valentía y la dedicación del personal de la Fuerza Aérea Colombiana, sino que también resalta el compromiso de la institución con la defensa de la integridad y la dignidad humana.