BOGOTÁ_ Desempleo 13.7%. Inflación 13.28%. Brecha salarial 23%. Tres situaciones que afectan especialmente a las mujeres. En ese contexto, Fincomercio, preguntó a mujeres de estrato 1, 2 y 3, cómo logran responder por sus obligaciones y a pesar de la compleja situación actual, reservar dinero para ahorrar. El resultado fue un listado de 20 hábiles prácticas que van desde comprar productos con descuentos por pronto vencimiento hasta hacer comida para varios días y guardar en la nevera porque están en una misión que bien podría llamarse, “haciendo magia con el dinero”.
“Este sondeo nos permitió encontrar que las mujeres han desarrollado diferentes formas de ahorrar. Primero, hacer todas las comidas en casa, esto es, nada de restaurantes. Segundo, quitar o reducir su plan de televisión e internet hogar. Tercero, cancelar el plan pospago y comprar paquetes por días para el celular. Cuarto, caminar y comparar en busca del mejor precio de los alimentos. Quinto, arreglarse el cabello y uñas en casa porque es más barato y sexto, llevar almuerzo en coca. Hay un sinfín de ejemplos como estos con los que la mujer colombiana lograr reducir gastos, hacer magia con su dinero y reservar un porcentaje para su plan de ahorro”, señala Mauricio García, director ahorro e inversión de Fincomercio.
Esto dicen las mujeres colombianas
Si usted es de los que piensa que “todo está muy caro” tiene toda la razón. A continuación, le presentamos lo que están haciendo las mujeres de a pie para hacer rendir el dinero.
Martha Angulo, asegura que, “yo de los 20 a los 30 años no tenía ingresos suficientes, tenía deudas y para acabar de completar me daba mis caprichitos. Hoy en día me hago la manicura en casa, en el mercado compro paquetes de $2.000 y le mando almuerzo en coca a mi hija, que, si usted hace cuentas comiendo por fuera son $60 mil a la semana que uno los puede aprovechar mercando en barrios populares y cuando necesito algo de salud, lo pido con los beneficios que tengo por estar en una cooperativa”.
“Me arrepiento por no ahorrar en mis años de juventud, según yo porque no me alcanzaba. Pero eso sí, salía al salón de belleza a hacerme las uñas, hasta que resolví que mejor me las hago en la casa para ahorrar esa platica cuando pensamos en ir a restaurante yo les digo que mejor compremos algo para preparar porque en la calle son mínimo $30 mil pesos por cabeza. Últimamente les pregunto si van a comer por la noche, para no desperdiciar la comida y cuando me sobra lo meto en la nevera para el otro día”, narra María Bolaños de 62 años.
“En la casa ya decidimos comprar frutica barata, ojalá que sea de los paquetes de promoción de la plaza, porque si compramos la que nos gusta sale muy caro y no hay palo pa´ cuchara. La otra cosa que ha tocado hacer es cambiar las marcas que usábamos, el sitio del mercado y hasta el tamaño de los frasquitos, por eso, compro en tiendas más baratas para llevar más mercado”, dice Sonia Cubillos de 49 años.
“Yo estudio y trabajo, por eso, mi ahorro empieza levantándome temprano, porque si me coge la noche me toca tomar bicitaxi o taxi y me descuadro. En productos de aseo, compramos por galones que me salen mucho más económicos y con la comida lo que hago es comprar en el mercado local del pueblo que es mucho más barato, y eso sí, llevo almuerzo en coquita porque ahorro buena plata. Si hablamos de ropa como nos gusta a las mujeres soy fan de los descuentos”, comenta Mónica Vargas de 26 años.
“Hoy en día a uno ya le toca mirar con lupa los precios y el tamaño de los productos para verdaderamente ahorrarse una plata. Lo otro, es llamar al proveedor de celular e internet y cambiarse de plan, si no me hacen descuento me voy para la competencia y el mercado de grano comprarlo para el mes porque eso de comprar cada semana me sale mucho más costoso”, cuenta Lucía Beltrán.
Ahorro programado es el preferido por mujeres en estrato 1, 2 y 3
Al analizar los resultados, la cooperativa encontró que uno de los trucos de las mujeres para ahorrar, es destinar un valor fijo antes de empezar a comprar las cosas del hogar para evitar que se le vaya ese dinero en el día a día, por lo cual, recurren al ahorro programado.
“Con 66 años de trayectoria en el mercado y especializados en atender estratos 1, 2 y 3, sabemos que el ahorro programado es una forma fácil para que la gente cumpla sus metas, porque al tener cuotas fijas de una determinada suma de dinero, por ejemplo $20 mil mensuales, en un tiempo establecido, que puede pagar por nómina o por ventanilla, la persona sí o sí ahorra. Además, como somos cooperativa la gente obtiene beneficios que no existen en el sector tradicional como accesos a recreación, subsidios de educación, salud visual y oral, con la ventaja de contar con el seguro Fogacoop, que es el Fondo de Garantías de Entidades Cooperativas”, menciona García.
El ejercicio también revela que en estratos 4, 5 y 6 el monto promedio mensual de ahorro es de $500 mil, lo cual demuestra que las mujeres han decidido ponerle una “r” más a la palabra “ahora”, para que ese ahora se convierta en ahorra.
Ahorro de la mujer colombiana por generaciones
La cooperativa reconocida por revelar tendencias, analizó la data y encontró la motivación número 1 para ahorrar según la generación a la que pertenecen las mujeres.
“Uno de los datos curiosos del sondeo es que los baby boomers tienen la filosofía de que el mañana será peor que el presente, por eso, ahorran para tener una fuente de ingreso en la vejez como comprar un lote, tener un negocio o comprar un inmueble para arrendar. Para la generación “X”, ahorrar para tener vivienda propia es una prioridad. Por el contrario, la generación “Y” ahorra para viajar, ya que vive el presente, y finalmente la “Z”, lo hace para estudiar”, añade García.
20 formas de ahorro de la mujer colombiana de a pie
1. Ir a la plaza en la tarde para comprar los saldos
2. Comprar paquetes de $2.000 en el mercado
3. Llevar almuerzo en “coquita”
4. Comer fruta que esté más barata
5. Comer antes de salir para no gastar afuera
6. Comprar productos con descuentos por pronto vencimiento
7. Mercar las verduras en barrios populares porque es más barato
8. Mercar lo de grano en marcas populares
9. Comprar para el mes
10. Invitar a tinto y aromática sin complementos
11. Guardar en la nevera la comida que sobre para el otro día
12. Preguntar cuánto van a comer en la casa para no desperdiciar
13. Mandarles lonchera a los hijos en vez de dinero
14. Sacarle provecho a los beneficios y convenios de cooperativas, cajas de compensación, fondo de empleados a los que estoy afiliada
15. Madrugar para no tomar transporte adicional
16. Comprar productos de aseo por galones
17. Comparar precios y tamaños de productos de limpieza
18. Cambiar proveedores de servicios de teléfono e internet más económicos
19. Hacerse la manicura en casa porque es más barato
20. Ir cine los miércoles que es a mitad de precio o comprarla con mi cooperativa y tener algún descuento
“Conocer de primera mano casos reales, me refiero a cómo están haciendo magia con el dinero las mujeres de a pie, nos impulsa a seguir creando soluciones de ahorro conectadas con el presupuesto real de las colombianas, teniendo en cuenta lo que viven a diario y lo más importante, mostrándoles estos casos reales de mujeres que como ellas tienen ingresos reducidos, y aun así logran ahorrar con nosotros porque somos absolutamente flexibles en los montos de inicio, nuestras cuentas de ahorro para adultos y niños se abren con solo $30 mil pesos mensuales y los productos de inversión como CDAT´S están disponibles desde $300 mil pesos, ventajas con las que justamente hemos logrado promover el ahorro en estratos 1, 2 y 3 como el principal hábito para cumplir metas”, narra emocionado García