SANTA MARTA_ En el barrio Mamatoco, situado al oriente de la ciudad de Santa Marta, su identidad y cultura tienen sabor a ‘bollo tres puntá’, un producto típico de ese lugar que ha alimentado a varias generaciones mamatoqueras, quienes junto a la Universidad del Magdalena, trabajan en conservarlo por muchos años más y trascender fronteras.
Llamado así por su forma geométrica que evoca los tres picos de la Sierra Nevada de Santa Marta, el ‘bollo tres puntá’ tiene su propio festival, organizado por la Fundación Adulto Mayor San Jerónimo de Mamatoco y apoyado por esta Alma Mater, que en su onceava edición, reunió a samarios y visitantes que se deleitaron con el único bollo en el mundo que se come al ritmo de la cumbia.
Son las matronas mamatoqueras, mujeres que cada año promueven este legado gastronómico con el festival, un evento que como en años anteriores, bajo el liderazgo del Rector Pablo Vera Salazar, volvió a exponer el trabajo artesanal de bolleras y bolleros.
Fue a través de un conversatorio entre iconos del barrio Mamatoco y el vicerrector de Investigación Jorge Elías Caro, donde una vez más se convocó a familias samarias a conocer las tradiciones de esta zona de Santa Marta.
“Es un compromiso adquirido por el Rector que busca que en este festival se resalte la tradición y desde exposiciones fotográficas y proyectos audiovisuales, mostrar la bondades de ese proceso de transformación de ingredientes de nuestro territorio a un plato típico que ya tiene un reconocimiento nacional e internacional”, manifestó el doctor Jorge Elías Caro, vicerrector de Investigación.
Durante el festival en el que se lograron vender cerca de 1.200 bollos, se exhibieron tres tipos de ingredientes característicos del bollo: de maíz, el de coco y el de queso, que estuvieron acompañados con sabores emblemáticos del Caribe colombiano como la arepa de huevo, pescado frito, chicharrón de cerdo, cayeye, arroz de lisa, butifarra, liza, cazón, entre otros.
Sofía Diana de Cardona, mamatoquera y bollera por herencia de sus abuelas, manifestó que la tradición de hacer bollos viene desde hace más de 100 años. “Este es un bollo que puede acompañar cualquier plato en el mundo”, afirmó.
Jhon Murillo, llegó desde la ciudad de Cartagena a disfrutar, por primera vez, del Festival del ‘bollo tres puntá’. “Es un bollo muy rico, suave y diferentes a los del Bolívar. Es importante que se conserven las tradiciones, no sé si en mi ciudad se realice un apoyo como este a los alimentos típicos, es admirable”, dijo.
Los visitantes pudieron apreciar la exposición fotográfica “Bollo tres puntá: tradición e identidad mamatoquera” y el documental audiovisual “Bollo tres puntá: Herencia mamatoquera”, donde dieron a conocer todo el proceso de fabricación del producto.
La comunicadora social, documentalista y fotógrafa Linda Esperanza Aragón, hizo parte del equipo de la Unidad de Apropiación Social del Conocimiento que creó este documental audiovisual: “Es un homenaje a esas matronas que luchan unidas por salvaguardar y exponer al mundo este legado gastronómico palpitante en Mamatoco”, señaló.
En sus inicios, este icónico lugar fue un asentamiento indígena; luego, corregimiento y hoy es un barrio tradicional de Santa Marta, donde a través de la tenacidad de ancestrales matronas sacaron adelante sus familias con este producto. Las ‘matronas’ solamente esperan que, por muchos años, las nuevas generaciones conserven la técnica de moler maíz, amasarlo, envolverlo en forma de triángulo, cocinarlo en leña y posicionar el ‘bollo tres puntá’ en la esfera nacional e internacional.